Este 5to. eje “observación y prácticas de la enseñanza” constituye una continuación de los ejes que recorren toda la propuesta curricular del Profesorado de Educación Especial. Se trata de un espacio de inserción de los alumnos en la vida cotidiana de la escuela común para desarrollar distintas prácticas propias del trabajo docente, atendiendo a la heterogeneidad propia de estas instituciones.

Siguiendo a Gloria Edelstein, entendemos la práctica docente como una práctica social compleja que:

- se desarrolla en escenarios singulares

- se ponen en juego valores, en forma contradictoria y conflictiva, demandando decisiones ético políticas.

- Se despliega en un ámbito particular de circulación de poder.

- Se desarrolla en un tiempo no lineal

- Constituye una permanente puesta en acto, donde se cruzan la palabra y el cuerpo en un encuentro de múltiples y contradictorios mensajes.

- Responde a realidades sobre determinados e indeterminados.

- Responde a una lógica propia que no es asimilable ni subordinada a la lógica de la práctica teórica, ni expresión lineal y mecánica de las prescripciones institucionales.

Desde esta posición la teoría y la práctica se reubican desde una relación diferente a la racionalidad técnica.

La teoría no puede ser ofrecida como verdad revelada que resolverá los problemas de la práctica siempre que ésta se subordine a aquella.

Los aprendizajes construidos en los dos años previos de formación y las apropiaciones teóricas que se irán produciendo simultáneamente a este eje de la práctica habrán de operar como instrumentos, como herramientas que cuestionen visiones del mundo y que aporten categorías, supuestos, relaciones, modos de operar que hagan posible observaciones, denominaciones y estructuraciones de la realidad concreta más rigurosas y también más cercanas a los propios posicionamientos ético políticos.

Por otra parte las tareas desarrolladas en las escuelas (observación, diagnóstico, auxiliar docente, enseñanza) operarán como fuente de experiencia y situaciones problemáticas que ponga en acto, cuestione, ponga en tensión los supuestos epistemológicos y los compromisos ético-políticos asumidos y las teorías aprendidas a fin de intentar un procesos de “acción-reflexión-acción”.

Guardando coherencia con el Plan de Estudios este eje de la práctica concretaría las siguientes intenciones del trayecto de formación:

a) Revisar representaciones personales de los alumnos, modelos, racionalidades, significados, vínculos y prácticas, productos de una
biografía personal y socialmente construida.

b) Instalar como eje de trabajo diversas aproximaciones a la práctica educativa específica desde primer año, para permitir la vivencia de las situaciones en las que se despliega el trabajo docente, la detección de problemáticas, la aproximación investigativa, el ejercicio de prácticas docentes acotadas y toda otra tarea que facilite el “conocimiento en la acción” y la “reflexión en la acción” (Schon, 1992).

c) Instalar espacios que permitan saber la mirada sobre la acción, posibilitando la reflexión, no sólo personal sino centralmente colectiva a fin de que se objetive la práctica desde las representaciones de sujetos posicionados diferencialmente.

1.- Las prácticas de enseñanza como aplicación de una teoría y como proceso dialéctico de “acción-reflexión-acción”.

2.- Prácticas de observación participante y no participante. Reflexión sobre la práctica.

3.- Prácticas de planificación de proyectos áulicos en las áreas básicas para EGB1 y EGB2 (matemáticas, lengua, ciencias naturales y ciencias sociales)

4.- Prácticas de Enseñanza (conducción y evaluación) sobre temas de las áreas básicas en EGB1 y EGB2.

5.- Autorreflexión sobre la propia práctica.

La asignatura es eminentemente práctica, entendiendo ésta como ya se expuso en la fundamentación (Gloria Edelstein, 1995), por lo que resulta muy difícil discriminar momentos teóricos y trabajos prácticos; si bien el devenir de este eje de la Práctica V se organiza en momentos de inserción en las instituciones escolares y momentos de organización y reflexión sobre la práctica.

A su vez el trabajo en las escuelas se organiza en un primer período de observación participante, oficiando el alumno como auxiliar del docente (1er. Cuatrimestre) y un segundo período de práctica de enseñanza (2do. Cuatrimestre).

Intentando no perder el carácter dialéctico de esta asignatura podemos puntualizar productos y prácticas que constituyen “resultados” parciales y finales que dan cuenta de los aprendizajes de los alumnos.

1.- Informe y autoreflexión acerca de las prácticas de observación en la escuela (por parejas).

2.- Planificación de proyectos áulicos sobre dos áreas básicas de EGB1 y EGB2. Elaboración de los recursos didácticos pertinentes (individual).

3.- Prácticas de enseñanza-conducción y evaluación de los proyectos planificados en el año de EGB1 o EGB2 asignado (individual).

4.- Informe de autorreflexión sobre las prácticas de enseñanza.

El orden asignado a estos productos parciales reproduce la secuencia del trabajo en las escuelas. En consecuencia es requisito para avanzar a la etapa siguiente la aprobación del trabajo anterior.

Por su carácter eminentemente práctico, esta asignatura no admite alumnos libres.

Para conservar la condición de alumno regular y promocional se requiere:

- 100 % de asistencia a los compromisos horarios asumidos con las instituciones escolares, admitiéndose únicamente inasistencias por enfermedad (personal o de familiar a cargo) que deberán ser justificadas con certificado médico visado por DOSPU.

- 80 % de asistencia a las reuniones grupales en la UNSL.

- Aprobación sucesiva de los cuatro desempeños citados en el Plan de Trabajos Prácticos. La aprobación de uno habilita para realización del siguiente. La reprobación de uno (y su correspondiente recuperación) implica la pérdida del carácter de alumno regular y en tal caso se deberá cursar nuevamente la Práctica V en su totalidad.

- Se considera alumno promocional a aquel que cumpla con los requisitos de asistencia y apruebe las tareas consignadas como Plan de Trabajos Prácticos con siete (7) o más de siete puntos.

- Se considera alumno regular a aquel que cumpla con los requisitos de asistencia y apruebe las tareas consignadas como Plan de Trabajos Prácticos con menos de siete (7) puntos..